Día a día, sin percatarnos, estamos siendo influenciados por la comunicación sin prender la televisión, o ver una revista, es más simplemente desde que nos levantamos. ¿Cómo? muy sencillo, hagamos un ejercicio simple; te levantas a las 6 am tomas tu ropa te arreglas, vas a la cocina, abres el refrigerador, tomas un Gatorade de limón para correr. Regresas de correr, te bañas con un shampoo Adidas, te arreglas, bajas a desayunar, abres el refrigerador, tomas una leche Lala y cereal Special K, abres un jugo Jumex, terminas. Haces tu lunch con una barra de Special K, jugo Ades y yogurt Danup , etc, y así podemos seguir con muchos ejemplo del contacto diario que tenemos con las marcas y en especial los empaques. Hoy en día, más que nunca el primer signo de comunicación de un producto es el envase y eso, en su mayoría, hace la diferencia para que el consumidor codifique el valor de marca, los valores y propiedades que hacen a ese producto.