La igualdad es una de las palabras más utilizadas en la actualidad. En tiempos electorales, los políticos hablan sobre la igualdad en el contexto de la lucha contra la pobreza o sobre la equidad de género. También los juristas hablan de la igualdad. En la filosofía del derecho se le concibe como uno de los ideales del derecho. En la teoría del derecho, la igualdad es el telar jurídico: el derecho se construye a partir de los casos, a los que les corresponden similares soluciones si son iguales y diferentes si son desiguales. Además la igualdad es un principio que reconocen expresamente la mayoría de las constituciones democráticas. En este último plano, mientras que en otras latitudes el estudio del principio de igualdad ha alcanzado un desarrollo importante, que concibe a la igualdad como un principio con sustancia, en México es casi nulo la doctrina que se ha ocupado de estudiarlo. Así, por ejemplo, mientras en Europa se distinguen desde hace tiempo las obligaciones del legislador derivadas del principio de igualdad en la ley, en México no se distingue todavía entre igualdad en la ley e igualdad ante la ley, pues se considera, como en el siglo XIX, un problema de estructura de las leyes.