La presente reflexión se ha realizado considerando a la bioética como una disciplina promotora del diálogo entre las ciencias bajo el marco de valores morales de la tradición occidental. Se aborda el tema del uso ético de antidepresivos en situaciones existenciales, más que en su uso terapéutico. Los objetivos son la revisión de los siguientes aspectos: a. Una visión antropológica. El hombre como ser carente, b. Los fines de la medicina y el uso de psicofármacos en situaciones limítrofes a la psicopatología. c. La medicalización de la vida humana. Se realiza un análisis de estos aspectos y una propuesta para el manejo de la tristeza en forma no medicamentosa, aceptando los límites humanos al acceso a la felicidad.