Santo Tomás de Aquino explica que en la ciencia de los móviles, al descender a los vivientes, se atiende a cada una de las especies de animales y plantas especificando qué es lo propio de cada una de ellas, y aquí es donde se encuentra De Sensu et Sensato. Aquino enumera los distintos tipos de vivientes con respecto a las partes del alma y enlista los libros que tienen relación con ellos, deduciendo que De Sensu et Sensato corresponde al acto exterior que se da en el sentir.